Tras el III torneo de
Carcassonne ciudad de Gavà celebrado el seis de Julio de 2013, Trenca’t la
Closca tenía en mente su última actividad para el verano de dicho año.
Hará cosa de unos meses,
en Gavà abrió las puertas un local cívico cuyo objetivo era el de realizar
charlas sobre temas actuales, ver películas… de todo un poco. Jaime, secretario
de la asociación, tuvo la idea de hacer una visita a dicho lugar y proponer la
idea de realizar una noche de juegos que, para ambas partes, sería beneficioso,
ya que la idea de los juegos de mesa gustaba a los moderadores de dicho local.
Así, la noche del 13 de
Julio de 2013, de 20h a 1h de la madrugada, en "La Màquia", que es el nombre de dicho centro cívico, se
celebró la noche de juegos.
La sensación personal que tuve al entrar fue la de
un bar cualquiera, puesto que tenían una barra donde servir bebidas y muchas
mesas donde sentarse. Una de las cualidades que más nos llamó la
atención fue el hecho de que no exigían nada de consumición por estar allí o
usar los servicios; como si querías llevarte comida de fuera y comértela allí…
Nada más llegar allí
situamos tanto los juegos de Trenca’t la Closca como los nuestros de El Dado
Dorado sobre una mesa, para que los asistentes los fueran viendo por encima.
Puesto que Trenca’t la
Closca era nueva en aquel lugar realizó una presentación personal de la
asociación: explicaron sus inicios, como conocieron los juegos, con cuales comenzaron,
un poco de explicación sobre cuando eran Plan B antes de diezmarse con el resto
de miembros y denominarse como se llaman actualmente, los juegos a los que
suelen jugar… Una charla que si mal no calculé duró una media hora mínimo. Lo
que más me llamó la atención fue el silencio sepulcral por parte de todos los
asistentes: estaban muy atentos e interesados, cosa que todavía motivaría
más a la asociación.
Tras la presentación, la
asociación decidió explicar por encima y mostrar los juegos que trajeron:
Dobble, Jungle Speed, Fantasma Blitz, ¡Aventureros al tren!, Colonos de Catan,
Carcassonne, King of Tokyo… y alguno que otro más.
Cuando terminó, me cedieron el
turno a mí, oportunidad única para presentarme, darme a conocer y perder
vergüenza a hablar cara al público, sobretodo. Los juegos que nosotros llevamos
fueron ¡Sí, Señor Oscuro!, Onirim, Zero, Kabaleo…
Tras la presentación de
ambos grupos, la gente comenzó a dispersarse y a querer jugar a juegos. Claro
que, antes, había que cenar, por lo que entre todos, o más bien, la mayoría,
pidieron pizzas. Aproveché aquel momento para regalar mazos de 30 cartas
promocionales a gente que conociera, ni que fuera un poco, el Magic a cambio de
que visitaran, si querían, la tienda de Ziggurat Jocs situada en Castelldefels.
Once personas se interesaron y estuvieron contentas. Al mismo tiempo iba
repartiendo mis propias tarjetas de El Dado Dorado para hacernos promoción. La verdad es que la
velada fue muy acogedora y los moderadores del local muy agradables y amables.
Así da gusto ir a los sitios.
Llegados a este punto,
sería explicar un poco por encima los distintos juegos a los que se jugaron a
lo largo de la noche. Los más jugados fueron aquellos de habilidad y reflejos,
es decir, Party Games, como Dobble, Jungle Speed, Ritmo y Bola, Fantasma Blitz…ya que la gente era poco entendida de juegos de mesa, así que comenzaron por aquellos que eran fáciles de aprender y rápidos para poder jugar a más de uno.
En primer lugar, tenemos
Junglee Speed. Cada jugador dispondrá de un montón de cartas boca abajo. Cada
una tiene un dibujo en concreto y un color. Siguiendo un orden de turnos, los
jugadores le irán dando a toda velocidad la vuelta a la primera carta de sus mazos, dejándolas
enfrente de ellos sobre la mesa boca arriba. Tan pronto como haya dos cartas
con el mismo dibujo sus respectivos jugadores deberán intentar agarrar a toda
prisa el tótem, que estará situado en el centro de la zona de juego. Quien lo
agarre es ganador y da al perdedor todas sus cartas puestas hasta el momento
sobre su lado de la mesa. Ésta es la mecánica sencilla, pero aparte hay otras
cartas que harán que el juego se complique todavía más, como tener que fijarse,
también, en el color de las cartas.
Fantasma Blitz es del
mismo estilo que los dos anteriores. Los jugadores tendrán delante de ellos una
serie de figuras: un sillón rojo, un libro azul, un fantasma blanco y un ratón
gris. Del mazo de cartas se le da la vuelta a la primera. En dicha carta
aparecerán dos dibujos, que representan las figuras físicas, es decir, el
libro, el sillón, el fantasma y el ratón. A veces una de ellas tiene el color
correcto, y otras no. Los jugadores deberán coger rápidamente la figura física
que coincida en color con las que aparecen en la carta. Por ejemplo: si en la
carta aparece el fantasma blanco y el ratón de color verde, deberían de intentar
coger el fantasma, ya que en la carta es blanco y la figura física es blanca.
En cambio, el ratón no se cogería, porque en la carta es verde, mientras que la
figura física es gris. Si por otro lado, ninguna de las dos figuras que
aparecen en la carta coinciden en color, habría que coger aquella figura física que no aparece en la
carta y aquella cuyo color tampoco aparezca. Por ejemplo: aparece un libro
verde y un sillón blanco. Puesto que la figura física del libro es azul (por lo
tanto, no coincide con la carta) y la figura del sillón es roja (en la carta es
blanco), tendríamos que escoger el ratón, porque no aparece en la carta y
porque el color gris tampoco aparece.
Un juego abstracto que
tuvo mucho éxito a lo largo de la noche y que también es rápido de jugar y de
explicar es Kabaleo. Una de sus mayores gracias es que las piezas son conos y
son la ostia de resistentes. Además, la caja parece una de esas de surtido de
galletas. Es un juego de faroleo y de darle al coco. El objetivo es hacer que
vuestro color sea el más visible de todos para poder ganar la partida. Os dejo
aquí la vídeoreseña realizada por mí.
King of Tokyo fue también
otro de los candidatos. Como juego fácil y rápido que es, a la gente le suele
entrar por los ojos, y es una buena elección para introducirles en el mundo de
los juegos de mesa modernos. Los jugadores se meterán en la piel de monstruos
que tendrán ganas de arrasar la ciudad de Tokyo. Con unos simples dados y unas
cartas de habilidad, el juego es la mar de divertido y ágil. El problema es que
no estaréis solos durante la invasión de la ciudad, por lo que luchar contra el
resto de jugadores será necesario sí o sí. Podéis ver la reseña del mismo
siguiendo este enlace si queréis saber más detalles.
Colonos de Catán es bien
conocido por la mayoría de jugadores y está considerado como uno de los pilares
de los juegos de mesa modernos. En este
juego los jugadores deben intentar hacerse con el control de Catan. Para ello
deberán construir pueblos y ciudades, carreteras que los/las conecten, extraer
recursos (trigo, piedra, arcilla, ovejas y madera) con un sistema de factor suerte , los cuales, obviamente, son imprescindibles para poder construir y,
además, comprar unas cartas que nos facilitarán la partida… comerciar con el
resto de jugadores para conseguir los recursos que no hayan podido conseguir en
la fase de extracción de recursos… Es muy sencillo de jugar y las partidas
suelen durar alrededor de una hora y media o dos horas. Aquel que llegue a 10
puntos de victoria se proclamará dueño de la isla.
Otro de los juegos
considerado como padre de los juegos de mesa modernos es Carcassonne. Su
sistema de juego, el cual se basa en que cada partida es diferente y en que el
tablero siempre es distinto, ya que los jugadores lo van construyendo a medida que van jugando, hace que sea bastante adictivo y guste a la
mayoría de gente que lo prueba. Básicamente se trata de crear caminos,
ciudades, granjas y claustros y de intentar hacernos con el control de todos
ellos. Claro está, que no es tan fácil porque el resto de jugadores nos pueden
poner las cosas complicadas. Podéis ver más del juego siguiendo este enlace a otra de mis reseñas.
Dobble también fue un candidato, ya que es un juego rápido y muy fácil de aprender a jugar. Éste es un juego compuesto por cinco minijuegos,
por lo que es posible jugarlo de cinco maneras diferentes. Se compone por cartas circulares repletas de
dibujos. El objetivo en todos los minijuegos es el de encontrar el dibujo que
se repite en el resto de cartas y mencionar su nombre. Tan sencillo cómo esto. Lo más gracioso es ver como la gente que está jugando no ve lo que se repite y los que están fuera de la partida, observando, sí.
Por último, hablaré de Zero. No es más que un juego de cartas de Reiner Knizia que la verdad es que es otro de esos para aprenderlos rápido. Cada jugador tendrá una mano de 9 cartas. En el centro de la mesa se colocarán cinco más. El objetivo es el de intentar hacer un "zero". Para ello, los jugadores deberán tener en la mano 4 cartas del mismo número, 4 del mismo color y una que complemente los dos grupos anteriores, es decir, que tenga el mismo número que el primer grupo y el mismo color que el segundo. La mecánica del juego se basa en coger una carta y en dejar otra sobre la mesa para que el resto puedan cogerla. Si queréis saber más, hay vídeoreseña.
Pues en un principio, ésto es todo. Si disponéis de algún ratejo y sois de Gavà o alrededores, os recomiendo ir a hacer una visita a este local. Nuestra experiencia fue muy positiva y todos salimos bien contentos. ¿Repetir?
*No estaría mal...
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